En estas sesiones, nos gusta jugar en un entorno natural, lejos de las antiguas fotos de estudio que tan poco les divierten a los niños, por eso buscamos un aire fresco, con colores y luces naturales.

Hasta ahora, los niños que han pasado por delante de nuestra cámara se divierten mucho más de lo que ellos esperarían de una sesión «aburrida» de fotos, porque nosotros sacamos nuestra parte más infantil y prácticamente nos hacemos sus coleguis.

Iremos al lugar que más os guste para hacer estas fotos al natural, terminando siempre con un atardecer en familia junto a sus padres, hermanos, mascotas, o incluso enseñándonos su hobbie favorito.